Caminando hacia Dios

Somos humanos situados y determinados por ideas fuerza que parten de nuestra crianza, creencias, formación, valores, historia personal, y por nuestro contexto cultural y social. Así, al construir relaciones con otros, podríamos estar cargando con “herencias” (heridas, ideales, temores, deseos, fijaciones) que dificulten nuestra capacidad de apertura y acogida del otro en la relación de pareja, en el matrimonio, o también en el noviazgo.

Como agustinos, hacemos nuestro el mensaje de las Escrituras, y reconocemos en nosotros un deseo de Dios que nos constituye como peregrinos hacia Él, que es nuestra meta, descanso, felicidad, y riqueza. Para llegar a Él, el camino es Cristo, en su humanidad y divinidad, en quien encontramos nuestra verdad, la sanación, la reconciliación y la misericordia para todos. Nos podríamos preguntar: ¿cómo vamos en nuestra peregrinación? ¿Acaso vivimos distraídos y divididos en tantas cosas que hemos perdido el Norte? Y en tu relación de pareja, matrimonio o de novios, ¿caminan hacia Dios, entre las dificultades y los logros?

Te ofrecemos este espacio de reflexión e interiorización para seguir buscando en la vida grandes ideales, movidos por el Espíritu que nos habita y nos orienta hacia el Padre Bueno en Cristo su Hijo.

Como en todos nuestros retiros, tendremos predicaciones, celebraciones, momentos de reflexión personal, Reconciliación y acompañamiento. Ofrecemos un espacio amplio con habitaciones dobles, comidas, materiales y traslados ida y vuelta.

Las inscripciones están abiertas hasta el miércoles 10 de mayo.