17 de julio – Domingo 16.º del Tiempo Ordinario: Lc 10, 38-42

“Antes de que lleguemos a esa única cosa necesaria, necesitamos de otras muchas. Que esa única cosa nos mantenga en tensión, no sea que las muchas otras nos relajen y nos alejen de aquélla”
(San Agustín, Sermón 255, 6).

Lectura del santo evangelio según san Lucas (10, 38-42)

En aquel tiempo, entró Jesús en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa. Esta tenía una hermana llamada María, que, sentada junto a los pies del Señor, escuchaba su palabra. Marta, en cambio, andaba muy afanada con los muchos servicios; hasta que, acercándose, dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola para servir? Dile que me eche una mano». Respondiendo, le dijo el Señor: «Marta, Marta, andas inquieta y preocupada con muchas cosas; solo una es necesaria. María ha escogido la mejor parte, y no le será quitada».

Palabra del Señor

Gloria a ti Señor Jesús